Camino

No se que camino tomar. No tengo caminos para tomar. No tengo caminos para elegir. Todo es un borroso laberinto que parece no tener salida, donde las difusas sendas cambian constantemente y no llevan a ninguna parte. En parte depende de mí; en parte depende de un puñado de personas desconocidas que únicamente miran por el peso de su cartera y que no piensan lo más mínimo en el futuro de las personas que dependen de la decisión que ellos tomen. Soy culpable de no haberme preparado todo lo bien que lo debería haber hecho y de no haber dado el 100%, pero eso no es lo que me impide tomar un camino. Como ya he dicho, lo que me impide tomar un camino es que no existe ningún camino para tomar. Solo queda luchar y esperar, cuando ya no queda tiempo para ello.